Esta asociación aparece entre las personas con elementos que se consideran compatibles. Por ejemplo, el agua y la tierra son elementos compatibles, y el fuego y el aire lo son también. La única excepción se hace frente a los signos del Zodiaco.
Ambas personas se sienten a gusto, como si un hermano o hermana se relacionaran. Ellos encuentran la comprensión mutua y la comunicación en un nivel de amistad.
Las diferencias que los acercan son más bien complemento y son beneficiosas para ambos, los cuales hacen desaparecer todos los posibles malentendidos bastante rápido.